Las vacunas de su hijo: el sarampión, las paperas y la rubéola (triple vírica)
¿Qué es la triple vírica?
La triple vírica protege contra el sarampión, las paperas y la rubéola.
¿Cuándo hay que vacunar a los niños?
Los niños reciben la triple vírica en 2 dosis:
- entre los 12 y los 15 meses
- entre los 4 y los 6 años de edad
Los niños que viajan fuera de los Estados Unidos pueden recibir esta vacuna a partir de los 6 meses de edad. Deben seguir recibiendo las dosis ordinarias a los 12-15 meses y a los 4-6 años de edad. Si permanecen en una zona donde el riesgo de estas enfermedades es alto, deberán recibir la primera dosis a los 12 meses y la segunda al menos 4 semanas después. Los niños mayores también se pueden vacunar si no lo hicieron cuando eran más pequeños.
Los niños pueden recibir la vacuna triple vírica al mismo tiempo que otras vacunas. A veces, esta vacuna se administra a niños de hasta 13 años junto con (en la misma inyección) la vacuna de la varicela en una vacuna llamada MMRV.
En Estados Unidos ha habido brotes de paperas y de sarampión hace poco. Un brote consiste en que una enfermedad se da en una mayor medida de lo esperable en un área determinada. Durante un brote, los médicos pueden recomendar una tercera dosis de estas vacunas a algunas personas, aparte de vacunar a los bebés a partir de los 6 meses de edad. Una dosis de la vacuna contra el sarampión también puede ayudar a proteger a las personas no vacunadas de enfermarse tras exponerse al virus el sarampión si la reciben en un plazo de 3 días. Si tiene dudas sobre vacunar a su familia durante un brote, llame a su médico o al departamento de salud de su estado o localidad.
¿Por qué es recomendable la triple vírica?
El sarampión, las paperas y la rubéola son infecciones que pueden llevar a desarrollar enfermedades graves. La mayoría de los niños que reciben la triple vírica estarán protegidos contra estas tres enfermedades durante toda su vida.
¿Cuáles son los posibles efectos secundarios de la triple vírica?
Los efectos secundarios leves son frecuentes e incluyen dolor, enrojecimiento y/o hinchazón en el lugar del pinchazo. Puede aparecer una erupción leve o fiebre una o dos semanas después de vacunarse.
Entre los efectos secundarios muy poco frecuentes, se incluyen tener mejillas hinchadas, las convulsiones febriles, un recuento de plaquetas bajo (que puede causar hemorragias o hematomas inusuales) y el dolor articular leve (en adolescentes y mujeres adultas). Como con cualquier vacuna, existe un leve riesgo de desmayo y una probabilidad muy reducida de reacción alérgica.
Cuándo retrasar o evitar la triple vírica
Un simple resfriado u otras enfermedades de poca importancia no deberían impedir que un niño se vacune, pero es posible que el médico de su hijo prefiera reprogramar la vacunación si su hijo tiene una enfermedad de mayor gravedad.
Hable con el médico de su hijo sobre si es o no conveniente vacunar a su hijo con la triple vírica en el caso de que:
- haya tenido alguna vez una reacción alérgica grave, o cualquier reacción alérgica, a una dosis anterior de la triple vírica, la MMRV o a sus componentes, que incluyen la gelatina y el antibiótico neomicina.
- tenga un trastorno que afecta al sistema inmunitario (como el cáncer)
- esté tomando esteroides u otros medicamentos que debilitan el sistema inmunitario (incluyendo quimioterapia o la radioterapia)
- tiene un hermano o un progenitor (madre o padre) a quien le han diagnosticado un problema en el sistema inmunitario
- ha recibido otras vacunas durante el último mes, o productos sanguíneos en los últimos meses
- ha tenido alguna vez un recuento de plaquetas bajo
- padece la tuberculosis
El médico puede decidir no ponerle esta vacuna a su hijo, o puede decidir que las ventajas de vacunarlo superan sus posibles riesgos.
Las mujeres embarazadas no se deben poner la triple vírica ni la MMRV hasta después del parto.
Cuidar de su hijo después de ponerse la triple vírica
Si su hijo desarrollara una erupción en la piel sin ningún otro síntoma, no necesitará tratamiento. Este tipo de erupción no es contagiosa y debería desaparecer en varios días. Consulte al médico de su hijo para saber si le puede dar paracetamol o ibuprofeno para tratarle el dolor y la fiebre, y averigüe cuál es la dosis correcta.
Un paño húmedo y caliente o una esterilla eléctrica sobre el lugar del pinchazo también puede ayudar a reducir las molestias musculares, así como mover o usar el brazo o la pierna donde su hijo se haya pinchado.
¿Cuándo debería llamar al médico?
Llame al médico de su hijo si:
- Duda sobre si debería o no posponer o evitar la vacuna.
- Aparecen problemas tras la vacunación.
Cómo ayudan las vacunas
Cada año, las vacunas mantienen sanas a millones de personas preparando al cuerpo para combatir enfermedades. Sepa de qué manera ayudan las vacunas y obtenga respuestas a sus preguntas.