Vías centrales (catéteres venosos centrales)
¿Qué son las vías centrales?
Una vía central (o catéter venoso central) es como una vía intravenosa (VI). Pero es mucho más larga que una vía intravenosa ordinaria y llega hasta una vena ubicada cerca del corazón o hasta dentro del corazón.
Un paciente puede recibir medicamentos, líquidos, sangre o nutrición a través de una vía central. Las vías centrales también se pueden usar para extraer sangre.
Tipos de vías centrales
Las vías centrales que se usan más a menudo son:
- los puertos implantados
- las vías centrales tunelizadas (también conocidas como catéteres centrales tunelizados)
- los catéteres centrales de inserción periférica (PICC, por sus siglas en inglés)
¿Cuándo se usan vías centrales en vez de vías intravenosas ordinarias?
Los médicos pueden usar vías centrales en vez de vías intravenosas ordinarias porque:
- Se pueden dejar puestas durante más tiempo (hasta un año entero o incluso más).
- Facilitan la extracción de sangre.
- Los pacientes pueden recibir grandes cantidades de líquidos y de medicamentos (como la quimioterapia) que no se podrían administrar a través de una vía intravenosa ordinaria.
Los médicos pueden colocar vías centrales en personas que:
- tienen una grave infección y deben recibir antibióticos por vía intravenosa durante varias semanas seguidas
- padecen un cáncer y deben recibir quimioterapia y extraerse sangre a través de una vía intravenosa
- necesitan recibir nutrición por vía intravenosa
- van a necesitar recibir muchas transfusiones de sangre
¿Las vías centrales implican asumir riesgos?
La mayoría de las veces, las líneas centrales no causan ningún problema. Si surgen problemas, estos se suelen deber a que la vía central se infecta y/o deja de funcionar. En contadas ocasiones, las vías centrales pueden causar coágulos de sangre. Los médicos revisan los riesgos con las familias antes de colocar una vía central.
¿Cómo pueden ayudar los padres?
Si a su hijo le han puesto una vía central, usted puede ayudar en su mantenimiento a fin de prevenir posibles infecciones y de asegurarse de que sigue funcionando bien. Es normal ponerse un poco nervioso al principio por tener que mantener una vía central, pero en poco tiempo usted se sentirá más cómodo haciéndolo. Le administrarán los suministros necesarios para que los pueda usar en casa, y un enfermero los visitará para ayudarlos a usarlos cuando lleguen a casa.
Antes de que su hijo vuelva a casa después de que le hayan puesto una vía central, pregunte al equipo médico que lo atiende:
- con qué frecuencia le debe cambiar el vendaje
- cuándo y cómo limpiar la vía
- qué hacer si el catéter se obstruyera o se saliera de su sitio
- cómo administrarle medicamentos a través de la vía central (si va a tener que medicar a su hijo en casa)
- si la vía tiene tapas, con qué frecuencia las debe cambiar
- qué actividades físicas debe evitar su hijo (la mayoría de los niños deben evitar jugar de forma activa o movida y los deportes de contacto)
- si es necesario proteger la vía central cuando su hijo se bañe
- en qué signos de infección se debería fijar
Informe sobre la vía central a los profesores, la enfermería del colegio, el orientador escolar y el profesor de educación física de su hijo. Ellos se podrán asegurar de que su hijo evita aquellas actividades que podrían estropear la vía y apoyar a su hijo a lo largo del tratamiento.