Hernias umbilicales
Una hernia umbilical ocurre cuando una parte del intestino del niño sobresale a través de la pared abdominal por la zona del ombligo. Se ve como un bultito que sale del ombligo. Las hernias umbilicales no duelen y la mayoría de ellas no causan ningún problema.
La mayoría de estas hernias se cierran por sí solas aproximadamente cuando el niño tiene 4 o 5 años de edad. Si la hernia no desaparece entonces o causa problemas, los médicos pueden recomendar operar al niño.
¿Cuáles son las causas de las hernias inguinales?
Una hernia es una parte del intestino que atraviesa la pared muscular que se supone que debería mantener al intestino en su sitio. En una hernia umbilical, la abertura se encuentra en el centro del ombligo, en una parte de la pared abdominal llamada anillo umbilical.
El anillo umbilical es el músculo que hay alrededor del ombligo. Durante el embarazo, el cordón umbilical pasa a través del anillo umbilical para aportar sangre y nutrientes al bebé en proceso de desarrollo. El anillo umbilical se debe cerrar poco después de que nazca el bebé. Pero, si no se cierra, el intestino se puede proyectar hacia afuera a través de él. Esto puede hacer que haya un bulto cerca del ombligo, sobre todo cuando el bebé llora, tose o hace esfuerzos.
¿Quién puede desarrollar una hernia umbilical?
Las hernias umbilicales son más frecuentes en recién nacidos y en lactantes de menos de 6 meses de edad. Aproximadamente el 20 % de los bebés tienen hernias umbilicales. Pero los niños mayores y los adultos también las puede tener.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de las hernias umbilicales?
El principal signo de una hernia umbilical es un bulto visible bajo la piel de la zona del ombligo.
La hernia se puede ver de mayor o de menor tamaño:
- Puede aumentar de tamaño cuando el niño hace algo que le crea presión dentro del vientre, como ponerse de pie, llorar, toser o esforzarse para defecar.
- Y se puede reducir cuando el niño se acuesta o se tranquiliza.
¿Cómo se diagnostican las hernias inguinales?
Los médicos diagnostican las hernias umbilicales al observar y palpar un bulto o hinchazón que se proyecta hacia fuera en la zona del ombligo. Este bulto suele aumentar de tamaño cuando el bebé llora y se suele reducir cuando el bebé se relaja y se acuesta boca a arriba.
El médico puede tratar de masajear con suavidad la hernia para que regrese al lugar que le corresponde dentro del abdomen (procedimiento conocido como reducción). Si una hernia se puede volver a colocar de nuevo en su sitio a través del masaje, recibe el nombre de hernia "reducible". Estas hernias muestran que el intestino no está atascado ("encarcelado") en la abertura de la pared muscular.
¿Cómo se tratan las hernias umbilicales?
La mayoría de las hernias umbilicales no son algo por lo que merezca la pena preocuparse, y desaparecen sin tratamiento médico cuando el niño tiene de 4 a 5 años de edad. Se operan solo si:
- La hernia no se cierra cuando el niño tiene 4 o 5 años de edad.
- La hernia se encarcela o se atasca (no se puede reducir).
Para operarlas, los médicos:
- Administrarán anestesia al niño para que se quede dormido a lo largo de todo el procedimiento y no sienta ningún dolor.
- Harán una pequeña incisión (corte) en la piel.
- Moverán la hernia de vuelta hacia el lugar que le corresponda.
- Cerrarán el orifico o el punto débil del músculo usando puntos.
- Cerrarán la herida con puntos de sutura absorbibles bajo la piel y tiras adhesivas sobre la misma. Estos puntos desaparecerán al cabo de 7-10 días.
A veces los niños necesitan someterse a una operación urgente cuando la hernia no es reducible.
En casa, usted puede apretar la hernia de su hijo, pero no ponga cinta adhesiva sobre ella para mantenerla en su sitio, hacia el interior del ombligo. Eso no haría que desapareciera, y podría causar problemas, como una infección.
¿Cuándo debería llamar al médico?
Las hernias umbilicales se suelen cerrar por sí solas sin necesidad de operar al paciente. Fíjese bien en la hernia de su hijo para detectar posibles cambios. Llame al médico si su hijo la sigue teniendo después de cumplir 5 años.
Llámelo de inmediato si:
- La hernia aumenta de tamaño, parece haberse hinchado o está dura.
- La hernia sobresale cuando su hijo está durmiendo, tranquilo o acostado boca arriba y usted no la puede desplazar hacia dentro cuando la empuja.
- Su hijo está muy inquieto o irritable y parece tener dolor.
- A su hijo le duele cuando le tocan la hernia.
- La piel que cubre la hernia está roja o parece estar más oscura que de costumbre.