Elección de juguetes seguros
Los juguetes son una parte importante y divertida del desarrollo de todos los niños. Pero cada año, son muchos los niños que deben recibir tratamiento en los departamentos de emergencia de los hospitales debido a lesiones relacionadas con los juguetes. La asfixia por aspiración es un riesgo en los niños menores de 3 años, porque suelen llevarse los objetos a la boca.
Los fabricantes siguen recomendaciones y clasifican la mayoría de los juguetes nuevos con etiquetas que indican la edad específica a la que van dirigidos. Pero lo más importante que puede hacer un padre (en especial cuando se trata de niños pequeños) es supervisar el juego.
Recomendaciones para los juguetes
La Comisión de Seguridad de Productos de Consumo de EE. UU. (CPSC, por sus siglas en inglés) monitorea y regula los juguetes con mucha atención. Desde 1995, todos los juguetes que se fabrican en los Estados Unidos, o los que se importan, deben respetar las normas de la CPSC.
A continuación encontrará algunas recomendaciones generales que debe tener en cuenta cuando compre juguetes:
- Los juguetes de tela deben estar etiquetados como resistentes a la llama o retardantes de llama.
- Los juguetes con relleno deben ser lavables.
- Los juguetes pintados deben tener pintura sin plomo.
- Los productos de arte deben indicar que no son tóxicos.
- Los crayones y las pinturas deben decir ASTM D-4236 en el paquete. Esto significa que han sido evaluados por la Sociedad Americana de Ensayos y Materiales (ASTM).
Manténgase alejado de los juguetes más viejos, incluso los que les pasan sus amigos y familiares. Estos juguetes tal vez no cumplan con las normas de seguridad actuales.
Y asegúrese de que un juguete no sea demasiado ruidoso para su hijo. El ruido de algunos juguetes electrónicos o musicales, juguetes con sonido y sonajeros puede ser tan fuerte como la bocina de un automóvil (incluso más fuerte si el niño se lo coloca directamente en el oído) y puede provocar daños auditivos.
Los juguetes adecuados para las edades adecuadas
Lea siempre las etiquetas para asegurarse de que un juguete sea adecuado a la edad del niño. Las recomendaciones publicadas por la CPSC y otros grupos pueden ayudarlo a tomar decisiones de compra.
Siempre que compre un nuevo juguete, asegúrese de tener en cuenta el temperamento de su hijo, sus hábitos y su comportamiento. Incluso un niño que parezca avanzado con respecto a otros niños de su edad no debería usar juguetes para niños mayores. La edad a la que van destinados los juguetes se determina por factores de seguridad, no por la inteligencia o la madurez del niño.
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Conservar los juguetes seguros en el hogar
Después de comprar juguetes seguros, también es importante que se asegure que de los niños sepan usarlos. La mejor manera de hacerlo es supervisar a los niños mientras juegan. De esta manera, les enseñará a los niños a jugar de manera segura y divertirse al mismo tiempo.
Los padres deben hacer lo siguiente:
- Enseñarles a los niños a guardar sus juguetes.
- Revisar los juguetes regularmente para asegurarse de que no estén rotos ni inutilizables:
- Los juguetes de madera no deben tener astillas.
- Las bicicletas y los juguetes para usar al aire libre no deben tener óxido.
- Los juguetes con relleno no deben tener las costuras rotas ni piezas que se puedan quitar a la vista.
- Deseche los juguetes rotos o repárelos inmediatamente.
- Guarde los juguetes para usar al aire libre cuando no estén en uso para que no queden expuestos a la lluvia o la nieve.
Y asegúrese de mantener los juguetes limpios. Algunos juguetes de plástico se pueden lavar en el lavavajillas, pero debe leer primero las instrucciones del fabricante. Otra posibilidad es mezclar jabón antibacteriano o un detergente suave para la vajilla con agua caliente en una botella con rociador y usar esta mezcla para limpiar los juguetes y después enjuagarlos.
Denunciar los juguetes inseguros
Visite el sitio en línea de la CPSC para conocer la última información acerca del retiro de juguetes del mercado o llame a la línea de atención al (800) 638-CPSC para denunciar un juguete que cree que es inseguro. Si tiene alguna duda acerca de la seguridad de un juguete, es preferible pecar de precavido y no permitirle al niño que juegue con él.
