La paroniquia es una infección que ocurre alrededor de las uñas y suele desaparecer por completo con tratamiento.
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La paroniquia comienza con un daño en la piel alrededor de la uña, con frecuencia por haber empujado la cutícula, por las manicuras frecuentes, por haber arrancado un padrastro (pellejo) o por chuparse los dedos. Esto permite que los gérmenes ingresen en la piel y causen una infección. La infección es más frecuente en los dedos de la mano, pero a veces ocurre en los pies.
La zona afectada se puede inflamar, enrojecer y doler, pudiéndose formar sobre ella una ampolla llena de pus (o absceso). En general, una paroniquia no es un problema y se puede tratar en el hogar sumergiendo la uña infectada en agua caliente durante 20 minutos unas pocas veces por día. Las paroniquias se suelen curar por sí solas al cabo de unos pocos días.
Si se forma un absceso, es posible que un médico deba drenarlo. En ocasiones excepcionales, la infección puede afectar al resto de los dedos de la mano o el pie y causar problemas más graves que requieran tratamiento.
Tenga en cuenta lo siguiente
Para ayudar a prevenir una paroniquia, es importante no toquetear o mordisquear la zona que rodea a las uñas, no cortar las uñas muy cortas, no empujar las cutículas y usar guantes de goma al lavar muchos platos o entrar en contacto con sustancias químicas.
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